Kayo Satoh aparenta ser una muchacha normal, de 22 años. Incluso luce frágil. Sin embargo, en Japón es toda una celebridad: modelo, juega Street Fighter IV y es presentadora de un programa de TV sobre videojuegos. Se hace llamar "Kayo Police", mientras que sus seguidores prefieren llamarla Lolita.
Su éxito es incontestable. No obstante, tras toda esa fama, Satoh ocultaba algo. Y ella misma decidió parar los rumores que la asediaban, contando su verdad en vivo y en directo. Kayo Satoh dijo que en realidad "soy hombre".
"Gracias a todos. Como dije en el show, cuando nací era niño y me siento muy feliz poder contarles de mi pasado. Voy a seguir trabajando como Kayo Satoh y estoy muy contento de que muchas personas me hayan aceptado", escribió en su blog, horas después de dar el notición.
De acuerdo a lo que reporta "Russia Today", Lolita agregó que cuando se fue de su ciudad natal, en Aichi, quiso asentarse en un lugar donde nadie la reconociera. Entonces decidió cambiarse de nombre y vivir como mujer. También admitió que nunca ha pasado por el quirófano y que gracias a su contextura física y a la magia del maquillaje, ha podido camuflarse sin problemas.
Lejos de condenarla, sus seguidores le enviaron centenares de mensajes de apoyo en su blog. "Me enteré por TV. Ocultar algo es doloroso, pero tu decisión fue valiente y te apoyo", posteó un usuario.
La historia de Kayo hace recordar que las geishas, en sus inicios, como artistas del entretenimiento, eran en su mayoría hombres. De hecho aún algunos sobreviven. Yunosuke, por ejemplo, reveló en 2008 que ganaba 200 mil dólares al año atendiendo a sus clientas. "Yo las hago felices y ellas me ven como uno de sus accesorios", dijo esa vez a CNN.
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